Las estrellas que no tienen masa suficiente para alcanzar la temperatura necesaria para quemar el Hidrógeno (un millón de grados en el núcleo), se llaman Enanas Marrones.
Las Enanas Marrones tienen menos que el 8% de la masa del Sol, y son enteramente convectivas, con corrientes internas que transportan gas a distintas temperaturas. La temperatura superficial es muy baja, entre 500 K y 3000 K, y sus tamaños son del orden del tamaño de Júpiter. Al ser tan pequeñas y frías, son extremadamente débiles, por lo que las primeras Enanas Marrones habían escapado la detección hasta épocas muy recientes. Las Enanas Marrones constituyen el extremo inferior de la Secuencia Principal, intermedia entre estrellas y planetas. Sin embargo, los límites entre Estrellas, Enanas Marrones y Planetas todavía no están bien definidos.